Sobre la antigua Real Maestranza de Sevilla, ahora simplemente Plaza de Sevilla. Sin toros, ni real.
Me inspiraron mucho las palabras de Calamaro en el programa de BFN y el paso a Cultura para escribir el corto relato de mi pensamiento sobre el indulto de ayer.Añadiendo la falta de costumbre de hacer las cosas bien y falta también de toros encastados a los que acuden de vez en cuando a ver las figuras, llamese Ana Rosa o como quieras y no a ver toros. Recuerdo las plazas son de toros. Así mi pensamiento fue este después de un día oscuro en el mundo en la calle en la Comunidad Valenciana. Ya que en tres de las localidades hubieron cogidas una de ellas grabe. Pero hablemos o mejor dicho escribo mi pensamiento nada mas llegar del toro embolado a las tantas de la madrugada.
Si llevar la tauromaquia a cultura es lo sucedido ayer en Sevilla, me declaro cateto.
Si el toro bravo es el Cuvillo de El Grullo, me declaro manso.
Si se trata de llenar las plazas hasta la bandera, me declaro vacío.
Si el toreo es moderno, me declaro antiguo.
Si esto es la evolución de la bravura es el indulto, me declaro muerto.
Como ayer me quede al ver el pañuelo del color del fruto por excelencia en Valencia.
Y que ni en Valencia que tan ambles somos, hubiese pasado lo de ayer.
Así que me quedo como Mou preguntado¿Por que?
En Francia ya lo han conseguido sin ningún alboroto ni tantos indultos inecesarios, sacando el TORO en la mayoria de sus plazas.
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